CCOO REWIND 2020
Antes de despedir éste fatídico año, queríamos realizar un breve ejercicio recordatorio sobre lo que ha acontecido a lo largo de un 2020 que será difícil de olvidar.
Empezábamos el año con estudios sobre vestuario para aportar propuestas a la que entonces debía ser la nueva contrata a partir de primavera-verano, los nuevos parquímetros seguían instalándose sin solucionar los problemas que todavía persisten (como ya advertimos a finales de 2019) y en el Park Güell sufrían tremendos temporales al pie del cañón.
En Aparcaments tenia lugar la ansiada Evaluación de Riesgos Psicosociales, que debía permitirnos tratar con la empresa las soluciones necesarias, a las problemáticas que vienen sufriendo las personas trabajadoras de la Unidad, desde hace ya demasiado tiempo y que finalizando 2020 continuan sin resolverse.
En marzo sufrimos con impotencia la pérdida de la unidad de Visualitzadors, tras conseguir evitar su cierre en 2018, esta vez no hubo oportunidad de comprometer al Ajuntament con la necesidad de mantener este servicio público de inspección. Poco después llegaría un desconocido virus que causó el Estado de Alarma declarado por el Gobierno y truncó el desarrollo habitual de cualquier actividad.
Esta situación condujo a la empresa a la presentación de un ERTE, en el que por nuestra parte, tratamos de garantizar que el personal de B:SM no perdiese ni 1 euro de sus ingresos anuales, logrando así que la aplicación del ERTE fuese complementada por la empresa para garantizar el cobro del 100% de la nómina del personal. No fue fácil conseguirlo ni realizar el debido seguimiento, en gran parte por los problemas que sufría el SEPE y los errores en la transmisión de datos, pero logramos que la aplicación del ERTE en la empresa fuese una de las que más protecciones ofrecía a las personas trabajadoras a nivel territorial y sectorial. La aplicación del ERTE ha sido especialmente sensible en Unidades como AREA, Park Güell, ZonaBus, Bicing, Anella, Fórum o Estacions, donde la actividad se redujo drásticamente o incluso a día de hoy no ha recuperado todavía cierta normalidad.
También se implantó tímidamente el teletrabajo, prácticamente a la fuerza y el impacto de la pandemia nos demostró lo poco preparada que estaba la empresa en este campo, pero se pudo implementar sin duda gracias al sobreesfuerzo de numerosos trabajadores/as, como por ejemplo los compañeros/as de sistemas. A la vez que se organizaban los servicios esenciales de la empresa, en el que por primera vez se incluía a los Agents Cívics por orden de alcaldía y los certificados de desplazamiento surgían para permitir la movilidad de los trabajadores esenciales durante el confinamiento.
Compañeros/as de unidades como Atención al Cliente, CSO y personal de estructura de diferentes departamentos, vieron incrementadas sus cargas de trabajo sin ser reconocido su enorme labor y esfuerzo.
En plena pandemia, el Port Olímpic pasaba a ser gestionado por B:SM con total desinformación por parte de la Dirección hacia la representación sindical, con graves problemas de vestuario y abastecimiento de material, unas instalaciones precarias y sin convocar al Comité en ningún momento para tratar la integración del colectivo al convenio de B:SM, que a día de hoy sigue pendiente de tratarse.
Con la nueva normalidad, apareció la necesidad de nuevos elementos de prevención para llevar a cabo las tareas de forma segura, que conllevó varias discusiones con la empresa, servicio de prevención y con algún proveedor del que desconfiamos en su momento. La situación fue complicada y no podíamos entender cómo la Dirección de B:SM podía desentenderse de ésta problemática, priorizando costes por encima de la salud del personal en una situación con tanta incertidumbre y miedo.
En verano se fueron consolidando los nuevos elementos de prevención, reclamábamos las intervenciones urgentes necesarias en Port Olímpic para poder trabajar con unas condiciones mínimas de trabajo. Agents Cívics realizó su primer servicio esencial extraordinario impuesto unilateralmente, a pesar de nuestro rechazo y se anunciaba la ampliación de plazas de estacionamiento regulado de AREA en barrios periféricos, a la vez que se perdían en el centro para convertirlas en ampliaciones de terrazas y debido a la pandemia se dejaba de realizar el doblaje a la espera de futuras negociaciones de calendarios que establezcan la nueva organización del trabajo, en la que esperamos que el sin sentido de la realización de doblajes desaparezca definitivamente.
A partir de septiembre se va recuperando cierta normalidad, adaptada a las nuevas condiciones derivadas de la pandemia. Se ponen en marcha las entregas pendientes de vestuario a causa de la pandemia, que paralizó tanto la nueva licitación como las propuestas realizadas derivadas del estudio de principio de año, y forzó una prórroga de la contrata existente. Vemos como los protocolos de prevención de la COVID funcionan, gracias en gran parte a la responsabilidad de las personas trabajadoras, demostrando que en B:SM la incidencia de casos es menor que la reflejada en los datos globales de Salut.
En octubre, la 2a ola de la pandemia nos dejó sin lugares aptos para el descanso y, ante la pasividad de la empresa para buscar soluciones adecuadas, convocamos una huelga para manifestar que un vestuario pequeño y sin ventilación no es aceptable para realizar un descanso y pone en riesgo la salud de los trabajadores/as. También se realizan las últimas intervenciones en la nueva oficina de Atenció al Client de Estació del Nord, que representa la ampliación de la Unidad frustrada por la pandemia, y que esperemos que pronto pueda consolidarse.
Y para acabar el año, observamos como se gestó un acuerdo sobre recuperación de días y variable, que hemos rechazado con argumentos desde el primer día, sin entender como se ha podido penalizar al personal, en vez de recompensar el esfuerzo realizado por muchos/as, durante los peores momentos de la pandemia y también como la empresa ha realizado las operaciones financieras oportunas, para compensar las pérdidas derivadas del descenso de la actividad producida por los confinamientos.
Estuvimos encima de las recolocaciones, con acuerdo o forzosas, de personal de ZonaBus para poder ser desafectados del ERTE ante las escasas expectativas de recuperación de su actividad a corto-medio plazo, lamentando que la Dirección de BSM no atendiera nuestra petición, de recolocar a los trabajadores/as en AREA temporalmente al estar ya acreditados y formados.
En Recaptació y en Manteniment observamos como se va reduciendo personal poco a poco, en un caso por la digitalización y en otro por la excesiva y continua subcontratación.
Las reclamaciones del CSO por las condiciones indignas del lugar de trabajo y los problemas de contratación a nivel global de la empresa, son dos ejemplos de problemáticas enquistadas que ojalá logremos desatascar el próximo año, pero que hoy en día y teniendo en cuenta la situación actual, está resultando muy difícil poder avanzar.
La presentación del Plan de Formación 2021 ha estado al mismo nivel de indignación que el del año anterior, por lo que volvimos a presentar informe desfavorable, así como la presentación de los Calendarios 2021, que en algún caso como el de Park Güell, representan un colofón indigno a todo lo que hemos sufrido este año y que ha conllevado una recogida de firmas masiva para manifestar a la Dirección el descontento de la plantilla y la petición de paralizar estos nuevos horarios.
Mención a parte, para el despropósito del rechazo a la solicitud de un Permiso Individual de Formación presentado por una compañera, demostrando la ausencia de sensibilidad de la Dirección en temas formativos y el desconocimiento de sus obligaciones.
Por todo esto, y por todo lo que seguirá en el próximo año, desde CCOO queremos daros las GRACIAS por vuestro apoyo, confianza y colaboración en todas las reclamaciones y luchas abiertas, y por nuestra parte estamos deseando empezar 2021 para seguir defendiendo vuestros intereses y poder dejar atrás un 2020 trágico para todos/as.
¡¡ FELIZ ENTRADA DE AÑO 2021 !!
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