HISTORIA DEL CONFLICTO
El conflicto en AREA explotó en marzo de 2022, con las convocatorias de huelgas de fines de semana para todo el año 2022, pero no nació en esta fecha, sino que se venía cocinando muchos años atrás gracias a la política de gestión de personas que ejecuta esta Dirección General de BSM, en la cual te hacen ver y sentir que ser una persona trabajadora de AREA tiene fecha de caducidad, invitándote continuamente a cambiarte de unidad, a veces de buenas maneras y en otras ocasiones por la vía del intento de la imposición.
Tras la pandemia, a nuestra vuelta al trabajo, estuvimos desarrollando nuestras funciones en horarios intensivos de mañana y tarde, durante casi 2 años, hasta que un buen día alguna persona responsable decidió que ya no era necesario mantener dichos horarios, aún cuando no podíamos cumplir con los aforos, y decidió aplicar los horarios de convenio, que incluyen 1 día de doblaje a la semana.
Las personas trabajadoras de AREA, no entendimos por qué no podíamos seguir haciendo unos horarios satisfactorios para ambas partes, los cuales habían cumplido con la cobertura del servicio para los nuevos horarios de zona azul, que el ayuntamiento amplió al mediodía (14h a 16h). No entendimos como se retornaban a unos horarios poco efectivos, que no garantizaban la cobertura de este servicio, algo que, sumado a los anuncios de continuas ampliaciones de zonas y plazas, nos llevaron a solicitar que se cumpliera el convenio, en su disposición adicional cuarta, que aquí os reproducimos literalmente:
La Dirección no solamente optó por incumplir el convenio colectivo, negando todos los cambios vividos en los últimos años en la unidad, sino que utilizó el doblaje como rehén para decir que se podía eliminar a cambio de trabajar domingos y festivos: Primero dijeron de trabajar 2, luego 3, más adelante 4, ahora ya vamos por 5 y si seguimos así en 2023 ya iremos por 6 o 29. Como siempre demostrando gran profesionalidad y coherencia.
Jugaron al chantaje y a la política del miedo como únicas armas para imponer sus condiciones, pero se encontraron una plantilla de AREA muy cansada de esta política de personas, que decidió plantarles cara, cosa poco común en esta empresa.
Una vez iniciadas las huelgas en marzo de 2022, con un éxito de participación aplastante (casi 100%) sin que se lo pudieran esperar, decidieron convocarnos para intentar solventar el conflicto y para nuestra sorpresa, no sólo no pretendían quitar el doblaje tal como establece el convenio, sino que mantenían su propuesta de domingos y festivos, añadían más jornada diaria de trabajo y más días anuales de trabajo. Pero como esto les pareció poco en su continuo intento de deshumanizar el AREA, pusieron encima de la mesa que las motos y coches deberían ser conducidas de manera obligada por el personal y, por supuesto, gratis. Todo ello tras llevar a cabo en 2021 un desmantelamiento de esta unidad para crear unidades específicas de conducción de moto y coche, las cuales no han dado solución a la evidente falta de personal para la cobertura de las diferentes ampliaciones de estacionamiento regulado en la ciudad. Algo que ya se advirtió por parte de la representación de las personas trabajadoras, pero que la Dirección no quiso escuchar. Evidenciando la poca autocrítica de ésta y su manifiesta incapacidad.
Ante dichas propuestas e intentos de introducir peores condiciones laborales, el Comité de empresa las rechazó al instante continuando con la huelga convocada.
EVOLUCIÓN DEL CONFLICTO
Tras casi 2 meses de huelga (mayo 2022), seguidas masivamente, la Dirección de BSM decidió vulnerar nuestro derecho de huelga y entregó 8 cartas a personas trabajadoras del AREA, en las cuales les indicaba que les modificaban las condiciones de trabajo de manera individual y pasarían a prestar servicio en otra unidad (SCO) para llevar coche y moto.
Este nuevo hecho fue percibido por la plantilla como un nuevo ataque y reaccionamos como correspondía, que era con una nueva convocatoria de huelga parcial, con el objetivo de que la empresa no obligara a nadie a coger moto ni cambiar de unidad.
En la mediación de dicha huelga obtuvimos un acuerdo por el cual se retiraban esas 8 modificaciones y nos comprometíamos a negociar hasta el 30/06 el nuevo modelo de AREA, haciendo una pausa en las huelgas convocadas de fines de semana.
Llegó el 30/06, el único día que la Dirección de BSM, tuvo voluntad negociadora para ofrecer algo, pero ya era tarde. Ese algo, era totalmente insuficiente para poder alcanzar un acuerdo.
La representación del Comité hizo varias y diferentes propuestas en dichas negociaciones, aunque tengamos que escuchar continuamente que no queremos negociar ni proponer y que no nos movemos de nuestra posición inicial, mentiras vertidas por una Dirección de BSM que nunca se había encontrado una oposición tan fuerte a sus pretensiones.
Hicimos diferentes propuestas para resolver el conflicto, todas ellas contemplaban trabajar domingos y festivos y llevar moto de manera voluntaria, pero no gratis, sino a unos precios que entendíamos que estaban acordes a la aceptación de cambios tan importantes como son trabajar los domingos y festivos, que en la unidad de AREA, no los tenemos regulados por convenio y siguen siendo voluntarios y retribuidos.
En julio de 2022 se reanudaron las huelgas de fines de semana nuevamente, con un éxito del 100% de seguimiento. La Dirección de BSM nos convocó a finales de julio para informarnos que en septiembre nos convocarían con nuevas propuestas para acercar posturas. Pero llegó septiembre y no hubo novedad ni convocatoria, ésta se produjo el 17 de octubre de 2022, tras la visita por los diferentes centros de trabajo de los representantes del Comité con el fin de proponer nuevas acciones.
Esperábamos un cambio en las propuestas de la Dirección de BSM y efectivamente lo hubo y mucho, pero fue un cambio a peor en todas sus ofertas. Antes pedían 3 domingos, ahora hasta 5. Antes haríamos 7h y poco diarias y en su oferta nos íbamos casi a 8 horas diarias, y así todo…
Pero lo peor no fue observar que la oferta era evidentemente más perjudicial que la anterior presentada en junio, sino que nos tomaran por auténticos ignorantes, intentándonos hacer ver que dicha propuesta “no era peor sino diferente”. Todo un ejercicio de cinismo, de falta de respeto o de estómago agradecido, lo que cada persona considere…
Y llegó la siguiente reunión de finales de octubre y tras observar la Dirección de BSM, que no íbamos a seguir por su camino continuo de burlas hacia las personas trabajadoras, decidieron anunciarnos la modificación de las condiciones de trabajo, vía artículo 41 del Estatuto de los Trabajadores, de carácter colectivo y su propuesta sería la misma que nos ofrecieron el pasado día 17/10/22, es decir, la peor de todas. Les advertimos que ese camino que nos anunciaban era entrar en una vía peligrosa, pero teníamos clara que su intención era generar miedo entre la plantilla y desgastarnos, para que acudiéramos raudos a pactar un acuerdo que únicamente satisficiera a la Dirección. Pero esto no ocurrió y se volvieron a encontrar con la firme oposición de la plantilla.
Se convocaron asambleas y se decidió la convocatoria de huelgas parciales los martes, para protestar contra este intento de imponer unas nuevas y peores condiciones de trabajo.
Una aclaración importante al respecto de la modificación de condiciones que pretende imponer esta Dirección de BSM, es que según legislación (Estatuto de los Trabajadores) no se pueden modificar unilateralmente aspectos que tengamos recogidos en convenio colectivo. Temas como los horarios y la jornada en AREA están regulados en acuerdo de Area Verde de 2005, que es un acuerdo incluido en convenio, por lo que les hemos instado a retirar este artículo 41, al considerarlo ilegal y, por lo tanto, actuaremos en consecuencia en caso de que lleguen hasta el final de su amenaza y lo quieran imponer.
No creemos que la Dirección de BSM se atreva a llegar a la imposición de las modificaciones de trabajo de aspectos regulados en convenio, sabiendo que antes o después una autoridad se lo va a rechazar, y no solo eso, sino que tampoco lo podrán volver a presentar jamás. Si finalmente lo llevan a cabo, que se atengan a las consecuencias, no solo las judiciales, sino las laborales, con nuevas movilizaciones y convocatorias de huelga. Si imponen la modificación vía artículo 41, más vale que se preparen para un 2023 muy calentito.
ACTUALIDAD DEL CONFLICTO
Hemos celebrado ya 2 jornadas de paro parcial los martes, con concentraciones masivas en las oficinas de Calabria, donde no solo hemos hecho mucho ruido, sino que tenemos conocimiento que les hemos molestado más de lo que se pensaban. Como de costumbre, han subestimando nuevamente a la plantilla.
La próxima semana tenemos convocada una nueva jornada de huelga parcial con concentración en la Plaza Sant Miquel, para que esta vez nos escuchen los máximos dirigentes de esta empresa pública, las personas con cargos políticos del Ajuntament de Barcelona.
Estamos cansados, pero con muchas ganas y energía para seguir con este conflicto y exportarlo donde haga falta mientras que la Dirección de BSM no entienda que si tiene una necesidad (domingos, festivos, motos…) nosotros vamos a obtener nuestros beneficios a cambio o, de lo contrario, no habrá acuerdo.
Solo depende de esta Dirección generar más conflicto o ponerle un poco de sensatez y cordura a todo este sinsentido que están generando con sus acciones y actuaciones.
Mientras tanto, esta Dirección de BSM continua utilizando a jefes de servicio de la unidad de AREA como auténticos "bufones de la corte" para que sigan difundiendo y escampando rumores sobre el futuro oscuro de esta unidad y de su plantilla, con el único objetivo de seguir metiendo miedo, porque su ineptitud no les permite conocer otra forma de gestionar a su personal.
Como ya les hemos dicho en varias ocasiones, les agradecemos que sigan visitando depósitos y haciendo comunicados para difundir las mentiras de la Dirección en vez de preocuparse por el día a día de un servicio que cada vez va peor y expone más a la plantilla, todo esto ayuda mucho a esta representación para que la plantilla tenga más ganas que nunca de seguir con este conflicto hasta donde haga falta.
Nos acusan de no querer negociar, de no haber hecho propuestas, todo mentiras que se han ido demostrando día tras día y que ya nadie se cree en esta empresa.
Con el objetivo de acabar con el conflicto, y demostrar nuevamente la buena fe de esta parte, hicimos una nueva propuesta el pasado 14/11/2022 en mediación de huelga, pero a día de hoy seguimos sin obtener respuesta alguna.
Estamos dispuestos a negociar y solucionar este conflicto, fuera de las imposiciones y del artículo 41, pero también estamos dispuestos a seguir batallando hasta el último segundo de nuestras vidas.
¿Que elegirán?
¿Negociación sin imposición con cumplimiento del convenio o Conflicto?
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