Hace ya algún tiempo que estamos observando con preocupación determinadas dinámicas en la empresa que creemos oportuno compartir para tratar de cambiar el rumbo que está llevando. Que las relaciones de la Dirección de BSM con las personas trabajadoras suelen ser convulsas, por desgracia ya no sorprende a nadie.
En la unidad de AREA, bajo la excusa (que no se la cree ni quién la manifiesta) de dar un mejor servicio a la ciudad de Barcelona y con el argumento de la COVID, modifican unilateralmente nuestros horarios regulados en convenio, sin negociar ni acordar con la representación social, volviendo a imponer un turno de doblaje alternativo que actualmente no está justificado por la naturaleza de la actividad. Por todo esto entendemos que la imposición nace con la única intención de seguir coaccionando a las personas trabajadoras para que abandonen la unidad de AREA (llevamos ya 6 años aguantando la misma cantinela). Todo esto resulta aún más sangrante cuando son las personas responsables del departamento, que deberían luchar por mantener la unidad, los que te invitan a abandonarla.
Es obvio que ante la ampliación de zonas reguladas que se está llevando a cabo por parte del Ajuntament, la insuficiente cantidad de vigilantes para la adecuada gestión de este servicio municipal resulta ya muy difícil de esconder por parte de la empresa, y la imposición del turno de doblaje con el objetivo de que una misma persona cubra más zonas reguladas estamos seguros de que no será la solución, y queremos imaginar que esta solución tampoco ha sido planteada des del Ajuntament.
Por otro lado, el colmo de la incompetencia llega cuando desde CCOO tenemos que informar a la empresa de las credenciales municipales para sancionar que han sido aprobadas por el Ajuntament. Desde antes de verano se han realizado varios cursos para solicitar estas credenciales, y por parte de la empresa siguen informando que no tienen ninguna noticia al respecto sobre la aprobación de las credenciales y alegan problemas con el Ajuntament, hasta que les explicamos que el pasado 21 de octubre se aprobaron la credencial para 4 nuevos vigilantes que, ¡Oh sorpresa!, casualmente son coordinadores CRETA, mientras que el personal operativo que ha realizado la preparación para acceder a las vacantes de vigilantes sigue a la espera de aprobación de las credenciales.
EL DESGOBIERNO EN MATERIA DE MOVILIDAD ENTRE BSM Y AJUNTAMENT ES DE VERGÜENZA AJENA.
La gota que colma el vaso es que presenten una promoción de administrativos/as de depósitos, olvidando a las personas trabajadoras que hace 8 años la Dirección de BSM obligó a abandonar sus puestos de trabajo recolocándolos en otras unidades. Antes sobraban, ahora faltan, pero los compañeros/as que llevaban años en dichos puestos ni siquiera merecen que se cuente con ellos, todo muy acorde a las políticas de personal que se llevan en BSM y que desde CCOO no vamos a tolerar.
En Aparcamientos seguimos esperando que la Unidad tome decisiones para resolver los problemas planteados una y otra vez de todas las formas posibles. Mientras se dedican a pensar en como vender espacios municipales para el uso y disfrute de plataformas de reparto, siguen los problemas de ausencia de personal en las instalaciones que conlleva una gestión suficientemente pésima como para que la delincuencia acuda a los aparcamientos a ponerse las botas con la misma alegría con la que se va de cañas y tapeo con el botín.
Queda claro que en cuestión de MOVILIDAD la empresa está haciendo aguas por todos lados, pero no todo acaba ahí:
Por primera vez en mucho tiempo, alcanzamos un acuerdo en materia de teletrabajo con la empresa, pero en cuanto se decidió aplicar, desde el minuto 1 ha sido pervertido relacionándolo con la aplicación del planteamiento de la empresa del sistema ‘flexitemps’ de flexibilidad horaria, un mecanismo para obligar tendenciosamente al personal a trabajar más tardes, de manera cicatera y poco generosa, como si fueran dos cosas unidas. Vaya, otra propuesta organizativa que va encaminada a las jornadas partidas y de doblaje, como en AREA, que casualidad.
Eso sí, para Atención al Cliente sigue sin haber propuesta de adhesión al acuerdo de teletrabajo, porque según la empresa ‘debemos tener claro quien es personal de estructura y quien es personal operativo’. ¿Acaso no han estado teletrabajando en Atención al Cliente durante la pandemia con muy buenos resultados?
La unidad de Agentes Cívicos continúa siendo un cajón de sastre en el que no se valora el trabajo que lleva a cabo para mejorar la convivencia en el espacio público, por el cual según la Dirección de BSM no merece ser recompensado por su capacidad de adaptación ante la pandemia.
Y así podríamos continuar relatando los problemas que en la mayoría de negocios de la empresa se dan lugar, y queremos dejar claro que a CCOO le gustaría que la Dirección de BSM recuperase las adecuadas relaciones sindicales, que aplique el convenio y el sentido común, y mientras entendamos que esto no se da, no podemos acudir a reuniones sobre ‘la cultura y los valores de la empresa’, que más allá de promover, desde la Dirección estan siendo destrozados, dejando a las personas trabajadoras cada vez más indefensas.
No vamos a ceder en la lucha y defensa de los derechos del colectivo, porque siempre estaremos mucho más orgullosos por el hecho de que BSM salga en la prensa por la defensa las condiciones de sus trabajadores/as y la gran profesionalidad de éstos que no por la reiterada incompetencia de su Dirección y su incapacidad para afrontar las problemáticas que tanto personas trabajadoras como la ciudadanía sufrimos a diario en Barcelona.
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